Golpea de visitante

Villa Reconquista volvía a recibir a Victoria luego de caer por las semifinales del año pasado y permitirle a quien sería el campeón de la Primera C la chance de jugar por ello. Las ganas de vencernos y las grandes posibilidades que tenían de hacerlo sabiendo de la ausencia de cinco importantes jugadores del plantel incluido el técnico aumentaban las expectativas.

Sin embargo, a veces las ganas solo se quedan en eso y el primer cuarto fue una clara muestra de ello. El 23 a 6 de los diez minutos iniciales fueron señales ciertas de que el campeón estaba ahí. Solo el último lapso del segundo parcial demostró el despertar local el cual sería efectivo tras la rotación de jugadores por parte de Victoria y el aprovechamiento de las contras y algunos rebotes ofensivos que el local pescaba bajo el canasto.

El clima de tensión se sentía en el ambiente por lo cerrado del juego en sí, aunque algunos idiotas se encargaron de trasladarlo a las tribunas cuando los insultos que en principio tenían como destino a nuestros jugadores - actitud propia de los nervios del partido si se quiere y moneda corriente en la mayoría de los gimnasios donde hay básquet- fueron dirigidos valientemente a las cinco mujeres que acompañaban a Victoria. Sin palabras...

Más allá de lo que pasaba afuera, en la cancha el resultado se cerraba cada vez más y de no mediar alguna situación en particular casi siempre esta tendencia se mantiene hasta al cierre. Pero el quiebre apareció y fueron de los nervios de la tribuna los culpables de provocarlo ya que contagiaron a sus jugadores quienes adoptaron la fuerza desmedida como arma para defender la ventaja que habían alcanzado promediando el último cuarto. Una seguidilla de faltas técnicas y antideportivas, acertadas desde la línea por los nuestros volcaron el resultado para este lado.

Mientras Victoria liquiadaba el pleito por 76 a 63, afuera se exasperaba aún más la tribuna y los mismos idiotas de antes planeaban lo que sería la cuota negativa del día, ya que si de hablar solo de básquet nos debemos, el partido fue emocionante de punta a punta.

Un poco impotencia, mucho de estupidez, nada de inteligencia, los elementos que suponemos motivaron a tres jóvenes de la tribuna para esperar en la salida a un jugador nuestro y golperalo cobardamente, para luego salir corriendo como si nada hubiera pasado. La nota positiva es que no se la llevaron de arriba -enseguida llegó la certera réplica- y después de discusiones y amagues todo volvió a la normalidad.

Es una lástima que haya ocurrido una situación de esta índole entre dos instituciones que cada vez que se enfrentan -dentro de un campo de juego, claro está- demuestran el muy buen nivel que tienen. De nuestra parte expresamos un absoluto repudio a que estos hechos de violencia se repitan, se incrementen en otras instituciones y/o categorías y en consecuencia se tomen las medidas correspondientes par evitarlos.

En definitiva, lo sucedido fuera de la cancha servirá solo como antecedente y lo que hay que rescatar tiene que ver con lo deportivo porque es allí donde Victoria demuestra que arrolla de local y golpea de visitante. Por algo es el puntero actual y el campeón vigente...