Duro, pero seguimos firmes
La excursión de las categorías inferiores al siempre dificil reducto del Club Caza y Pesca de Don Torcuato, fue sumamente dura, con choques cerrados de punta a punta, malos arbitrajes que incidieron directamente en algún resultado y mucho nerviosismo del público que asistió a los juegos -trasladado al campo de juego- hicieron que los dos triunfos conseguidos sean vitales en todo sentido teniendo en cuenta estas características.
El juego de Infantiles fue un claro ejemplo de ello. Caza y Pesca supo sacar una diferencia amplia en el primer cuarto producto del buen partido de su base, pero Victoria pudo acercarse en el marcador hasta igualar las acciones, algo que le trajo complicaciones sobre el cierre, producto del gran desgaste físico realizado en ese lapso.
Fue triunfo local en puntos, 78 a 67, pero tranquilidad para el técnico Tomás Secchiari quien puede quedarse tranquilo por la actitud demostrada por sus jugadores.
Los Cadetes tuvieron un juego por demás complicado. La ventaja de tan solo dos puntos, 86 a 84, que determinaría a la postre el éxito de Victoria es más que descriptiva a la hora de resumir lo que fue el juego.
Duro en la marca, y en algunos pasajes hasta mal jugado, fueron imagenes que se pudieron observar en los cuarenta minutos de partido de los que solo se puede destacar la muy buena participación de Manuel Perez. Buen triunfo y los primeros puntos que quedaban en casa.
Los Juveniles también debieron sufrir bastante para superar por 78 a 74 al local. Al igual que en el juego del turno anterior -quizá en este un poco más visible por algunos errores arbitrales- no se vio buen básquet pero no careció para nada de emociones hasta el bocinazo final.
Victoria fue quien manejó las riendas del partido y tal vez por confianza o bien por el ímpetu de Caza y Pesca de quedarse con los puntos en su territorio, para el cierre del juego fue un intercambio permanente de dobles a favor de quien se equivocara menos. La suerte y la efectividad en los libres estuvieron del lado de la visita quien supo mantener así la ventaja que sería definitiva al cierre.
Como siempre el choque más esperado de la noche a último turno suele ser el de Sub 22. Aunque para este choque entre dos históricos rivales de zona norte y por causas que deconocemos la expectativa era aún mayor pues el marco de público así lo expresaba. Mucha gente para ver un juego que comenzó a pedir de la visita quienes con una muy buena defensa y ataques organizados, haciendo jugar a los postes cuando la transición lo requería y algunas corridas certeras de contra supo sacar una tranquilizadora diferencia al medio tiempo.
Luego de ese lapso, el juego se desvirtuó por completo y en eso tuvo mucha responsabilidad la dupla de jueces. Ir en búsqueda de un rebote se transformó en una batalla cuerpo a cuerpo que solo vencía aquel que pusiera el codo más fuerte, ante la la mirada inoperante de los árbitros que permitieron todo tipo de roces e intentaron solucionar algunos reclamos con faltas técnicas, algunas de ella reprochables.
Con ese panorama y aprovechando las desconcentración de Victoria en el tercer cuarto, Caza y Pesca repondió con certeros lanzamientos de tres colocando una diferencia de cinco o más puntos, indescontables hasta el final de partido debido al cambio de dobles, detalle que provocó algún desmán por parte de la visita cuando jugadores del local quisieron burlarse de su rival.
Un partido absolutamente accesible que se escapó por no saber jugar ante la adversidad, llamese jueces, contrarios, nervios, etc. y la oportunidad desperdiciada de seguir subiendo en la tabla general quedan únicamente de este triunfo de Caza y Pesca 80 a 75..
